Futura Sede de la Fundacion Rosa de Luxemburgo. Berlín
Concurso internacional. Finalista
UBICACIÓN
Berlin, Alemania
AUTORES DEL PROYECTO
Gerardo Ayala Hernández
Mateo Ayala Calvo
Marcos Ayala Calvo
COLABORADORES
Mª Concepción Calvo Campos, Ingrid Halbach, Leticia Roqués Gómez, Sergio Jiménez González, Mª Carmen Pozo Saavedra, Javier Prats Bonet, Almudena Rodríguez Cózar, Alejandro Rodríguez Fraga, Carlos Arquer Fernández
SUPERFICIE
6.000 m2
FECHA CONCURSO
Febrero 2016
MEMORIA
En la Strasse der Parisier Komunne, se encuentra la parcela de la futura Sede de la Fundación Rosa Luxemburgo. Esta calle une la Karl Mark Allee y la Mühlenstr, dos de las calles principales del barrio de Friedrichshain.
A esto, tenemos que sumarle la cercanía de la Ostbahnhof con más de 100.000 viajeros diarios, y la cercanía de la Berlin Arena, lo que convierte el lugar en el escaparate perfecto para la Nueva Sede de la Fundación.
El edificio se sitúa en la alineación de la Strasse der Parisier Komunne, desde donde se realiza el acceso y en la de la futura plaza que compartirá con la antigua Postbahnhof.
El programa plantea dos usos completamente diferenciados, por un lado un uso público, abierto, bullicioso, que albergará todo tipo de eventos, y por otro, las oficinas de la fundación, un programa ordenado, silencioso y representativo.
Este es el mayor reto del concurso, conseguir que ambos “edificios” convivan en uno solo, respetándose y potenciándose el uno al otro.
El proyecto se organiza en planta sobre una trama regular moduladas. En las plantas bajas y formando un basamento, se desarrollan y organizan los usos públicos, atravesados por llenos y vacios y descansando sobre este, aparecen las plantas de oficinas.
Vestíbulo general de acceso y las Salas Gastronómicas se sitúan en planta baja, en conexión directa con la calle. Por la parte trasera se realizará la carga y descarga del edificio, permitiendo realizar estas labores necesarias sin entorpecer el funcionamiento normal del mismo. La sala gastronómica puede abrirse a su vez sobre el vestíbulo para ampliar su aforo y sobre la calle para albergar un evento abierto.
Se plantean dos accesos independientes que permiten ser utilizados en horarios o situaciones distintas. Las escaleras que protagonizan el espacio del vestíbulo sólo darán acceso a la parte pública del programa, quedando el núcleo de empleados independiente.
En la planta primera, a la cual el público accederá por la gran escalera que discurre por un vacio que atraviesa las distintas plantas, nos encontramos con las salas multiusos de 100 m2 y con las salas de 25 y 50 m2, con la posibilidad de que cualquiera de ellas crezca y se abra hacia el vestíbulo, apropiándose de este espacio común.
La biblioteca se sitúa en la planta superior del basamento, en la zona más tranquila de este, ocupando esta planta prácticamente en su totalidad.
Volviendo al vestíbulo principal de la planta de acceso, nos encontramos con la conexión con las plantas de oficinas, con la zona privada, que descansa y se desarrolla sobre el basamento, consiguiendo de este modo conjugar ambos usos dentro del mismo edificio. Estas comunicaciones forman una medianera que protege al edificio de la cercanía de las vías elevadas de la Ostbanhof.
Las seis plantas de oficinas tienen una distribución “metódica”, completamente versátil, permitiendo cualquier configuración posible. Todas ellas comparten y orbitan alrededor de un gran vacío que conecta todos los niveles y sirve como lugar de encuentro de todas las secciones, será, este vacío, el corazón de la fundación, atravesado por pasarelas a distintos niveles que permitirán la fácil comunicación entre unos despachos y otros.
Rematando las oficinas, nos encontramos con la planta de presidencia, en la cual se han colocado las salas de eventos especiales, conectadas con la terraza-mirador, para ganar en reporesentatividad. Desde esta situación, se tendrá una vista inmejorable del Spree y el sky-line de Berlín.
La propuesta huye de los gestos meramente formales tan de moda en la actualidad, y pretende moverse en equilibrio por el fino filo entre el necesario carácter público de la zona de eventos y la intimidad y serenidad de los espacios interiores, entre las referencias a la arquitectura intemporal y la elegancia de las soluciones constructivas del lenguaje moderno, para conseguir una imagen integradora serena y representativa.